La gente del barrio organizaron un viaje hacia Bayahibe, una playa muy bonita por cierto, bueno nos fuimos 1 hora después de la hora establecida para variar, en el camino de ida todo fue muy bien íbamos haciendo coro en la parte de atrás del autobús.
Llegamos como a las 11 de la mañana, durante el viaje alguien comenzó a rumorar que había una playa nudista cerca, el caso es que cuando llegamos había uno de los que andaba con nosotros muy interesado en saber donde estaba, cuando son las 6 de la tarde que nos vamos a ir, todo el mundo comienza a recoger cuando de pronto nos damos cuenta que nos hace falta alguien, adivinen quien era, el mismo muchacho que estaba preguntando por la playa nudista el caso es que todo el mundo se puso a buscar el muchacho y nada de aparecer , cuando a la hora y media llega el con la cara larga, parece ser que no encontró lo que buscaba, le dieron una pela al carajito que hasta a mi me dio pena. Pero la cosa no termina ahí.
En el viaje de regreso hubo dos muchachitos que les cayó mal la comida y les dio diarrea, por suerte para los muchachos y por mala suerte para nosotros el autobús donde vinimos tenía un baño, el vaho que dejaron era tan fuerte que todo el mundo se mudo para adelante, incluso tuvimos que pararnos en un colmado para comprar mistolin, cloro, detergente pero aun así no valió nada el vaho seguía igualito. Todos los asientos de atrás quedaron vacíos, entonces mis amigos y yo nos hicimos los chivos locos y a base de mucha nariz logramos chuparnos el bajo y cojeemos cada uno un asiento de los más grandes y dimos una dormida de palito, ahí comprendí cuan poderoso es el sueño porque el olor era muy fuerte.
Pensaran que soy un criminal pero na valor. Eso son historias para los nietos.
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